viernes, 8 de marzo de 2013

Cuando te casas


Cuando era novia de mi marido, fuimos por primera vez a un macro centro comercial que habían abierto en el cual estuvimos siete horas, nos lo pasamos genial, teníamos esa risa tonta de cuando estás tonteando, aguanto lo mucho que miré y compré, lo pasamos bomba, me ayudaba con la ropa.
Eramos novios y fue un día estupendo.
Hace dos días, otro centro comercial pequeño, cinco minutos deprisa para comprarme una cosita de nada, mi marido en el probador mirando para el techo o el reloj con mala cara. Salimos del establecimiento y ya nos ibamos para casa...¿qué te pasa? pues que siempre estamos igual fue su respuesta. No respondí.
Pero pensé...¿Qué siempre estamos igual? cuando eramos novios le mostré tal cual era, fuimos a un centro comercial, nos lo pasamos en grande mirando, comparando, comprando o eso creía, que nos lo pasamos en grande...no engañé a nadie con lo que me gustaba, no fue algo oculto que ha salido después...¿entonces qué ha pasado?
¿por qué no le gusta lo que antes nos gustaba?
¿se puede cambiar tanto en tan poco tiempo? ¿qué pasa cuando te casas?
Este blog es mi desahogo, mi marido según mi madre es ideal, así que con ella no cuento, y con mis amigas tampoco así que....
¿os ha pasado alguna vez que vuestro marido ideal hace cosas que algunas veces os sacan de quicio?

16 comentarios:

  1. Perdona que tu entrada me haya hecho sonreir porque a medida que iba leyendo me he visto reflejada y no solamente yo sino a todas mis amigas.... a ningún marido le gusta salir de tiendas aunque sí que les gustaba mucho a los novios. Y aunque no lo digan se les nota en su mirada o cuando dicen ¿acabas ya?.......ya ves que tenemos algo en común.Besotes

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    1. Gracias Charo, por tu experiencia y por qué veo que es algo normal, últimamente ando baja de ánimo y mi cabeza daba vueltas en plan pesimista, yo es que soy muy románticona y muy idealista y claro tengo que aterrizar. Me han gustado tus palabras que me has puesto, me han animado,y si ya tenemos algo en común, jeje. Gracias por tu opinión, Un abrazo!!!

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  2. Jajaja perdona qu me ria pero te engañaste sola.
    Sólo conozco un hombre al que le guste ir de compras (mi padre), aunque seguro que hay más; pero admitámoslo, a la mayoría no le gusta.
    A tu marido no l gusta, ni le h gustado nunca. En el noviazgo llevamos puesta una careta para enamorar al otro, no por engañarle, es simplemente miedo a que hayan cosas que no le gusten. Tú mostraste que te gustaba ir de compras, y te creíste encantada que a él también, pero la culpa no es suya. Si lo piensas seguro que en algo también tú disfrazaste la verdad.

    Durante el "enamoramiento" ocurre amenudo que tragamos con cosas que e el amor maduro no estamos y dispuestos a aguantar. Esto sucede más aún rn noviazgos cortos o muy ansiados (cuando uno ha estado tras el otro mucho tiempo y ha tardado en enamorarlo).

    Lo que sucede es absolutamnte normal, también porque de novios todo el tiempo que se pase juntos no es nunca suficiente, parece que no hy horas en el dìa para estar con el amado, luego al casarnos podemos estar muchas más horas juntos y sabemos que al volver a casa estará nuestro cónyuge, por lo que no hay tal ansiedad por psar tiempo juntos sea en lo que sea.

    Ánimo, es absolutamente normal, trata de no esperar tú algo que no te puede dar (esperar con sonrisa profident tres horas mientras te pruebas miles de prendas) y dale un abrazo agradecido.cuando muera por ti y te acompañe de buen humor (aunque no de buena gana).

    Saludos!

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    1. Gracias por tus palabras porque tienes mucha razón pero a menudo viene bien desahogarte y que alguien te explique lo que es, como bien dije a Charo es que yo soy muy romanticona e idealista así que basta que estés un poco baja de humor para que una de importancia a algo que es normal. Gracias por tu explicación, me vienen muy bien tus palabras. Un abrazo!

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  3. Totalmente de acuerdo con lo que dice Clo.
    Ni la mujer, ni el hombre ideal existen, querida.
    Todos cambiamos, evolucionamos. Y el amor conyugal también pasa por distintas fases.

    De todos modos, me pregunto si a tu marido o a tus hijos, si los tienes, les hará gracia que ventiles las intimidades en internet.

    Por cierto, Clo, me alegra saber que a parte de a mi padre, al tuyo también le gusta ir de compras. Ya hay dos así en el planeta tierra. ¡Los tenemos que presentar! :))

    Mucho ánimo.

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    1. Si soy muy idealista y tengo que aceptar los cambios que se producen en el amor conyugal. Nunca he comentado cosas personales , además creo que soy muy pudorosa con mi vida privada, más que intimidades creo que ha sido un comentario del cambio que sucede del noviazgo al matrimonio, de todas maneras mi marido lee las entradas y no le ha parecido mal, entiendo que lo hayas hecho por mi bien pero es algo natural del que muchas veces hay que hablar sobre todo si como yo me cuesta hablar de estos temas y parece que en el blog me es más fácil. Gracias por tu opinión, todas son valiosas y me ayudan con lo cual creo que son positivas. Un saludo!

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  4. Déjame que te cuente según mi punto de vista masculino. Es cierto, lo que dicen antes, a los hombres no nos gusta ir de compras, en mi caso, nada de nada. y claro, eso se nota, lo noto yo, lo nota mi mujer y lo nota quién me vea. Entiendo tu amargura y cabreo, pero no creo que debas preocuparte. En el noviazgo uno hace lo que sea por pasar cada segundo con la mujer amada y le da igual un sitio que otro, hacer una cosa, que otra, lo importante es el otro. Cuando llega el matrimonio, y los hijos, si los tienes, en mi caso sí, la cosa cambia un poco, ya no sólo sóis dos, y nunca lo seréis, hay más miembros con quién repartir el cariño, los gustos y el tiempo, y también se acumulan y multiplican los trabajos, obligaciones y preocupaciones y es cuando se empieza a notar las cosas que más nos cuestan. Lo ideal es buscar tiempo para los dos, compartir lo que a una le gusta con lo que al otro le gusta y así, uno por el otro, el otro por el uno, buscando hacer cosas que gusten a los dos, será más llevadero las cosas más complicadas para el otro. Estoy seguro que tu marido te quiere mucho si sigue de compras contigo, y por más cosas imagino, aunque ponga cara de seto, te lo dice uno que suele estar con cara de seto en estas circustancias y quiere a su mujer con locura. Cúidate y anímate, que ya verás como las cosas cambian. Un abrazo

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    1. Olé por la opinión masculina, así que ¿a los hombres no os gusta ir de compras? jeje, pues la próxima vez que mi marido ponga cara de seto, jeje, me acordaré que al menos me acompaña y que me quiere mucho a pesar de su cara, jeje, soy una romanticona y no acepto que las cosas evolucinen, me encantaría que todo fuese como cuando se es novios pero claro todo cambia y tengo que aceptarlo, cada etapa tiene sus coas bonitas también pero como na está pesimista pues parece que sólo ve las menos bonitas. Gracias por tu opinión. Un abrazo!

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  5. Nadie es perfecto, quizá tu marido tenía un mal día, o a saber,... pero yo creo que lo mejor es buscar un momento de calma y decirle lo que sientes, o lo que te pareció. Recordarle lo bien que lo pasábais cuando érais novios. :)

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  6. Hola guapa! Si la verdad es que en momentos de calma hay que hablar de todo lo que nos gustaba hacer aunquee lo de las compras no lo veo, jeje... y buscar esos momentos buenos. Gracias por pasarte por aqui y por dar tu opinión. Saludos.

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  8. Su marido seguro que piensa que al revés también sucede con otras cosas. Pero le explico la situación: A un hombre no le gusta nada ir de compras, pero cuando eran novios él sopesó y comprendió que le compensaba aguantar siete horas en un centro comercial si podía pasar el día con usted. Ahora no le compensa aguantarse porque ya la ve a usted todos los días.

    También le digo que durante el noviazgo, sobre todo si es cortto, no es que seamos falsos pero sí disimulamos mucho y mostramos solo lo mejor de nosotros. Después en el día a día de 24 horas de convivencia, ya no saben disimulos.

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    1. Sí, no le falta razón, si que disimulamos un montón cuando somos novios pero claro 24 horas todos los días, ahí ya no puedes, te ven como eres, lo que pasa es que soy un poco idealista y pretendía que la etapa de noviazgo durase eternamente, jajá, y que le encantase venir conmigo de compras, eso no existe, ¿verdad? vale, pues lo asumiré...Gracias por su opinión, real como la vida misma. Saludos!

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  9. Gracias por pasarte, me quedó por aquí también. yo no estoy casada pero llevo muchos años con él y aunque me acompaña a comprar ropa, se cansa antes porque no le gusta mirarla ni para el mismo. pero a mi también me ocurre que a veces aunque veo partidos de fútbol con él, alguna vez si ha ido acompañado a verlo no he ido. a no ser que a lo mejor tengamos poco tiempo para pasar ju.tos, que en ese caso al menos estás con él ese ratillo, pero sino no pasa nada..y tambien soy muy romanticona, jeje. no significa que te quieras menos, pero hay más confianza y uno es sincero. besitos

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  10. Sí es cierto pero es que soy muy romanticona como tu también dices y es nombrarle la palabra compras y ya su cara se va transformando...jajá, por lo que me han dicho todas las opiniones eso es algo normal así que compartido con todas y todos me he quedado más tranquila porque parece que es algo normal, jeje, gracias por quedarte, bienvenida, entonces ya nos leeremos, Besos!!!

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  11. Hoy has conseguido sacarme la risita tonta, parece que estuvieras describiendo cualquier día de compras con mi marido jajaja, en mi caso ya hemos llegado a un acuerdo: el se va con el niño al parque o al cine y mi hija y yo nos vamos de tiendas, cuando termino le doy un toque y se acabaron las caras de seto. Porque yo tenia que soportar la cara de los dos, y eso que mi hijo tiene 8 años, debe ser algo genético.
    Me quedo por aquí.
    Besos.

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